Los SUEÑOS están para cumplirlos.

Hola a tod@s:

Por fin, un sueño cumplido.

El estado de satisfacción es mayúsculo, siempre habíamos comentado el RESPETO que nos producía esta aventura. Sobre todo, esto es una aventura para los europeos del sur. Aun así, hemos quedado delante de unos cuantos equipos nativos (¿vikingos?) y qué decir de los abandonos de otros. Equipos nórdicos con perros bloqueados, y un equipo entrenado en los canales de Zaidín y Ripoll acabando una gran prueba en el círculo polar, de 500 km., se dice pronto. Puede parecer, desde fuera, una tarea sencilla, pero nada más lejos de la realidad, esto es muy duro. Ayer salía a las 1:30 de la madrugada con una tirada por delante de 130 km. No fui consciente, hasta que después en meta me lo comentaron, que salí a -40 º C. Las pestañas, las cejas, la barba, el polar del cuello pegado a la chaquetilla, todo helado. Me pasé la lengua por un pegote de hielo del bigote y se quedó pegada al instante. Los perros, con las barbas heladas. En definitiva, te vas haciendo a la dureza tal como pasan las horas y los días. Tengo los pies hinchados y dos dedos amoratados. Problemas circulatorios en manos y brazos. Esperamos que remitan en breve estos síntomas.

Faltaban 20 Km. para meta y me preguntaba si iba a tener algún tipo de reacción emocional en la línea de meta. Estaba muy neutro. Un Km. antes de la llegada y, como de broma, una cuesta de 500 m. con un desnivel brutal. Los perros se paran y dicen “hasta aquí hemos llegado”. Me quedé hundido, no les podía pedir nada más a mis perros.
Hay gente buena en todas las partes. Un señor que venía paseando por detrás, me saludó amablemente y, sin yo decirle nada, cogió a los lideres de los collares y echó a correr hacia arriba. Una chiquilla bajaba en nuestra dirección con un husky y se dio la vuelta para que nuestros perros se motivaran a jugar con su perrillo. Una vez arriba, el primer señor se puso a correr delante de nosotros animando a nuestros perros, para entrar en la línea de meta.

Nos costó. Emergieron todos los sentimientos amagados. Ver a Sacris, Begoña, Helena, Miquei, Arias, Miguel y Noemí animando, y también emocionados.

(La espera desde la línea de llegada era desesperante. Sonaba la música y terminaba la canción y parecía que nunca íbamos a ver aparecer las cabezas de los líderes… Y volvía a sonar la canción de llegada. -1492:la conquista del paraíso, de Vangelis-. Cuando les vimos aparecer, ayudados por la gente, daban ganas de salir y tirar de ellos también.)

La organización, felicitándome. Me emocione tanto que lloré. Nunca me sentí mejor.
Habrá tiempo para reflexionar, habrá tiempo…….

Gracias a todos los que nos habéis seguido, felicitado y animado, tanto por mail, mensajes en el blog y por teléfono, habéis sido muchos los que habéis creído en nuestro sueño. Muchas gracias. Una vez en España os responderé a todos.

Hasta la vuelta.